«Se alteró la conducta política en estos últimos años, no hay límites y el fraude es visible»
Hay que tener en claro que los sistemas eleccionarios no son buenos ni malos de por sí, el problema es que hoy los mismos son manipulados.
El problema que vemos hoy es que cuando un gobierno se ve amenazado de perder, las conductas políticas para evitar eso no tienen límites, son capaces de cualquier cosa, y es aquí donde la democracia es remplazada por el fraude.
Lo que hoy vemos en Tucumán es visible porque el sistema fue el tradicional: boleta y urna, el fraude estuvo cuando estos fueron quemados. Pero también vimos cómo se hizo fraude mediante la boleta electrónica, solo que más sutil, más elegante. Por eso insisto, el problema acá es que cuando el gobierno tiene la voluntad de hacer fraude, se hace.
Cada paso que se da en este extenso proceso electoral despierta mayor conciencia en la gente que no se puede permitir la alteración de la voluntad popular mediante cualquier maniobra sea esta moderna o antigua.
En mi gobierno nunca nadie me acusó de no asegurar una elección transparente. Hoy todos debemos darnos cuenta y exigir esa transparencia, la continuidad de un gobierno no debe depender de sus ganas, sino del voto democrático de los ciudadanos.